La cadena de centros de estética, que ofrece un modelo de negocio prácticamente sin inversión inicial, emplea de manera directa a más de 800 personas.

Opencel, especialista en estética de última generación, ha sabido adaptarse a la situación actual con un concepto de franquicia sin grandes desembolsos, lo que le ha permitido sumar un gran número de franquiciados, y como consecuencia, de empleos.

Y es que la empresa brinda con su modelo de franquicia una oportunidad sin precedente para el autoempleo, reproduciendo un negocio de éxito sin que el franquiciado tenga que pagar prácticamente nada.

El franquiciado no tiene que pedir financiación ya que solo tiene que acometer una mínima inversión: únicamente tiene que buscar un local en la zona que éste elija con una renta de 500 u 800 euros, que ya esté completamente reformado y que sólo necesite una mano pintura y decoración. “Al no cobrar nada de inicio, cada día nos contactan personas desempleadas buscando una forma rentable de autoempleo”, explican los responsables de la empresa.

Creadores de puestos de trabajo

Con los casi 300 centros que tiene Opencel, ya se han generado más de 800 puestos de trabajo directos (el 90% de los centros tienen entre 1 y 3 empleados). Además, hay que sumar el trabajo que se genera de forma indirecta (transportistas, fabricantes, etc.).

De este modo, el novedoso modelo de negocio de franquicia de Opencel se ha convertido en un arma para combatir el desempleo.

Rentabilidad, imagen, resultados eficaces, aparatología de última generación y precios muy competitivos la convierten en un negocio de estética exitoso.