Se trata del contrato más típico y habitual de franquicias.
El franquiciador concede el derecho a explotar una sola franquicia al franquiciado, que la explota él mismo.
Esta tipología ocupa la mayoría de las franquicias que triunfan.
Se trata de una franquicia en la que el franquiciado explota un solo local.
Tiene una zona en exclusiva para abrir una unidad durante el plazo del contrato.
El franquiciado individual no sub franquicia ni abre más locales.
Es el modelo que más se relaciona con el auto empleo. Esto es un empresario que monta una sola franquicia para dedicarse a sacarle el máximo partido.
Debido a este factor son las que mejor funcionan.
Ventajas
- Dedicación al negocio y concentración
- Equilibrio ideal de las condiciones de franquicias
- Es el perfil más abundante
Desventajas
- Se tiene una red amplia