La enseña colabora con multitud de proyectos solidarios con el fin de mejorar la calidad de vida de los más desfavorecidos de las zonas en las que se instalan.

Los protagonistas de Ben & Jerry’s son sus helados de calidad. Pero no están solos. La enseña se caracteriza también por su filosofía empresarial comprometida que, desde su creación en 1978, le ha llevado a colaborar en diferentes proyectos de apoyo social. La enseña destina parte de los beneficios a proyectos solidarios y medioambientales, además de fabricar sus helados de forma climáticamente neutral.

Presente países como Estados Unidos, Reino Unido, Suecia, Irlanda y Holanda, la compañía promueve acciones que mejoran la calidad de vida de los ciudadanos más desfavorecidos del lugar donde se instalan, a la vez que trabaja por la salud del planeta con políticas ecológicas y campañas de sensibilización sobre los efectos nocivos de las acciones del hombre sobre la Tierra.

En España, donde Ben & Jerry’s tiene 36 heladerías, la enseña ha colaborado en proyectos como INOUT (un albergue cuya plantilla está compuesta en un 90% por personas con discapacidades psíquicas), en la reinserción y ayuda a jóvenes en situación de marginación social con Fundación Exit y en su lucha contra el cambio climático con Acción Natura.