Protecsol es una cadena de franquicias especializada en la protección solar para el hogar y la industria. Sus productos y servicios permiten al cliente final ahorrar en el consumo energético. “Instalamos láminas de rechazo solar a fin de proteger el edificio o la vivienda de la incidencia solar directa, consiguiendo así ahorro en el consumo energético y un bienestar total en el uso de las dependencias. Además trabajamos con la lámina antigraffiti y de seguridad principalmente para comercios, lámina decorativa, vinilos impresos, de corte y de rotulación; todo tipo de cortinas (enrollables, venecianas, de lamas verticales u horizontales, estores, pachettos, etc.) en tejidos de rechazo solar y convencionales…”, explica Marco Bugalla, socio director de Protecsol.
Una serie de servicios dirigidos tanto a clientes particulares, como a pequeñas y grandes empresas, hoteles, entidades públicas y privadas… “Toda superficie acristalada que requiera un control solar, protección o decoración, se convierte en el marco perfecto para nuestros productos”.
Una franquicia perfecta
Con un amplio mercado al que dirigirse, Protecsol se define como una franquicia de baja inversión y alta rentabilidad. “Perfecta para el momento presente, ya que permite a los emprendedores tener un autoempleo y a los clientes controlar los gastos”.
Protecsol tiene tres centros propios y nueve franquicias y el objetivo es impulsar su crecimiento este año. “Sólo en el primer semestre de 2012 se han abierto dos nuevos establecimientos propios y cuatro franquicias. Este año está resultando especialmente bueno para la franquicia, por lo que esperamos poder cerrar el año con 20 franquicias. Esto supondría la apertura de ocho franquicias más en los próximos meses”. Planes para los que Protecsol busca personas emprendedoras, que muestren afinidad personal con el concepto de negocio. “Personas con capacidad para gestionar un negocio consolidado y con carácter innovador y vocación de aprendizaje de nuevos métodos, tanto comerciales como de gestión del negocio”.
PARA INCORPORARSE A LA FRANQUICIA
El franquiciado no tiene que ser experto del sector, ya que la franquicia le prepara para ser un profesional de su negocio. Previo a la iniciación de la actividad, se realiza un curso de formación teórica y práctica de los productos y servicios. “Después, una vez la franquicia está en marcha, la central se encarga del suministro de materiales y da un apoyo personalizado desde el Departamento de Coordinación de Red”.
Y el franquiciado, ¿qué actividad realiza en su día a día? “Es fundamental la labor comercial para la promoción de nuestros productos, el seguimiento de presupuestos enviados a clientes, la realización de instalaciones y la posterior facturación, el servicio de atención post-venta y la revisión del acabado”. Con este concepto, Protecsol quiere crecer en todo el territorio nacional, aunque tiene preferencia por instalarse en las zonas costeras del país.
Invierte en un negocio con más de 14 años de experiencia en el acondicionamiento de edificios, fomentando el ahorro energético.