Ya se puede disfrutar La Feria de Abril en cualquiera de los establecimientos de La Andaluza repartidos por todo el país. Esta celebración forma parte de un periodo de Fiestas populares de primavera en las que se basa la oferta de La Cadena de Franquicias de Tapas.
Este año la Feria es especialmente temprana y ya desde el lunes 7 de abril las casetas ofrecen la tradicional cena del pescaíto. Esta cena es el punto de partida de una festividad donde se come, se bebe, se charla y se baila sin parar. Conmemorando este día característico, Bodega La andaluza lanza un nuevo plato para compartir. Se trata del “Pescaíto de Feria”. Una selección del mejor pescaíto y uno de los platos más consumidos durante los días de feria. Pescado de las costas andaluzas, harinado y frito a la manera tradicional de estas tierras.
Bodega La andaluza no sólo celebra La Feria, si no que seguirá de fiesta también durante el mes de Mayo. Las bodegas conmemorarán las Cruces de Mayo, costumbre especialmente arraigada en Granada o Córdoba. Pero también la Romería del Rocío y el Corpus, festividades muy arraigadas en Andalucía, y que se celebran, como La Feria, reuniéndose con la familia y amigos, comiendo, bebiendo, charlando y sobre todo bailando.
Gambas de Huelva, Langostinos, Jamón de Jabugo, Revueltos Rocieros, Pescaíto Frito, Panes de la Casa,… Una sucesión de platos para compartir, serán los pilares de la oferta gastronómica en estas fechas.
En La andaluza, se han propuesto durante estas fiestas de primavera, que todo el que visite sus restaurantes pruebe la “Manzanilla de Feria” y “El Rebujito Fresquito”. Para ello han lanzado una campaña especial donde regalan botellas de Manzanilla, siempre muy fría. Y para quienes prefieran algo más refrescante y suave, el regalo será una jarra de Rebujito: Manzanilla, Hielo y Sprite o Seven-Up, la fórmula secreta para los que aguantan largas jornadas de fiesta.
Bodega La Andaluza, es una oferta de restauración basada en productos de alta calidad, que destaca por su carta de vinos y el auténtico sabor de la cocina andaluza. Se trata de un negocio atractivo para todo tipo de público, tanto nacional como extranjero, porque ofrece los sabores auténticos de siempre y la imagen tradicional real, fuera de tópicos, que evoca la cultura del sur de España. De este modo, consigue trasladar a los clientes a un establecimiento tradicional basado en los antiguos despachos de vino del siglo pasado pero con las comodidades y avances del siglo XXI.