La Loggia Gastrobar es una franquicia de restauración que ofrece platos de autor con toques mediterráneos. Se trata de una adaptación del típico bar de tapas en lo que se considera algo más refinado, como pequeñas degustaciones de platos mayores.

Loggia Gastro-bar ofrece la degustación de diferentes productos calificados como “gourmet” y, aunque en muchas ocasiones se asemejan estéticamente a los bares de tapas, se trata de una experiencia diferente que nadie debe perderse porque. Una franquicia con la que los socios franquiciados acceden a un negocio de hostelería con los platos y productos de toda la vida reinventados por la cocina de autor.

En esta franquicia, todo está diseñado para que la gestión del negocio sea sencilla. Suis productos son de elaboración propia y gracias a su cocina centralizada los franquiciados consiguen reducir el tiempo de preparación, cocción, limpieza y manipulación. De hecho, en la franquicia solo tienen que calentar, emplatar y servir. No tienen mermas ni pérdidas desconocidas provocadas por la manipulación de las materias primas para los clientes.

Así, el franquiciado consigue un mejor control de stocks: entradas y salida del producto por unidades, sin costes ocultos y sin pérdidas por “no ventas”. El margen es constante.

Dos opciones de franquicia

• Opción A: Desde 120.000€ hasta 200.000€ (dependiendo de las características en las que se encuentre el local, si está en bruto o con un mínimo de instalaciones realizadas).
• Opción B: Renovación de negocio de restauración ya en marcha. Desde 60.000€ hasta 120.000€.

La central te ofrece:

• Trabajo continuo para desarrollar nuevos productos
• Capacidad de adaptación a las nuevas tendencias
• Fabricación propia de la mayor parte de los productos de la carta.
• Labor de I+D+I para la búsqueda de nuevos productos y la mejora constante de la calidad.
• Experiencia en el sector que convierte a la empresa en un referente de la hostelería
• Platos de autor que se caracterizan por su calidad, frescura, naturalidad
• Plataforma logística propia

El orígen de la franquicia Loggia Gastro-bar

La empresa nació en 1999 como un proyecto familiar de autoempleo dedicado a la elaboración de platos cocinados y platos gourmet. En 2013 se abrió el primer establecimiento tipo restaurante con marca propia, bajo el paraguas de la empresa Royal Menú Catering S.L. Un año más tarde abrió sus puertas otro establecimiento dedicado a la restauración con marca independiente y seguidamente una cafetería con sello de autor, sumando así tres vías de negocio diferentes.

Perfil del franquiciado

Persona dinámica con perfil gestor, interés por el mundo de la restauración y con un objetivo de autoempleo.

No se necesita experiencia previa en el sector ni cocineros especializados, por lo que cualquier persona con la previa formación solventará cualquier necesidad solicitada por el franquiciador. Los costes se reducirán para aumentar la rentabilidad del restaurante.