La cadena de panaderías La Reposada nació como la panadería catalana del siglo XXI, que consiste en un punto de compra diario donde el pan actúa como producto gancho para conseguir un flujo constante de gente, que luego complementa el ticket medio con productos de temporada, festividades, especialidades…

La experiencia en el sector viene por parte de los tres socios tanto desde la industria panificadora como del comercio detallista y el marketing moderno: Marcel Venosa, Andreu Costafreda y Carles Torrecilla. El objetivo es abrir 100 tiendas en tres años en toda España, unas 50 propias y 50 franquicias. Son ya cuatro tiendas propias en Cataluña y el plan es crecer por toda España.

La historia

La cadena de panaderías La Reposada nació a manos de un apasionado por el retail, Marcel Venosa, que se asoció con un amigo suyo, inversor y con la tradición de la harina en las venas, Andreu Costafreda.

Decidieron reinventar el negocio de las panaderías y hacerlo desde el punto de vista del cliente, por ello quisieron contar con algún especialista en marketing: el profesor y economista Carlos Torrecilla.

Con La Reposada, reinventaron la panadería del siglo XXI. Cogieron la tradición y las costumbres de la gente y lo readaptaron.

¿Por qué crecer con franquicias?

Tras abrir cuatro tiendas propias, los tres socios tuvieron claro  que tenían un modelo de negocio muy bueno. ¿Las razones? Se requiere un local más o menos pequeño, los alquileres ahora están a precios asequibles, supone una inversión por punto de venta relativamente reducida (80.000 euros local llave en mano más 20.000 de canon de entrada)…

La franquicia les permite crecer y ceder un negocio exitoso a otros emprendedores. El franquiciado es una figura importante para La Reposalda, alguien que esté al frente del negocio, en su día a día.

Es una fórmula de negocio muy atractiva para los emprendedores, porque cada día se genera cash. En un mes, la tienda está abierta, además de ser un negocio contracíclico.

Además de crecer con socios franquiciados, La Reposada quiere seguir abriendo locales propios.

Perfil del franquiciado

No buscan un perfil concreto. Si es un empresario, sabrá muchas cosas de negocio y si es alguien que no viene del sector, no importa porque la cadena le forma en sus tiendas propias.

La Reposada puede ser un negocio para que el franquiciado esté al frente o bien para un inversor que quiera que le proporcionen desde la Central un responsable que lleve el día a día del negocio.